domingo, 8 de agosto de 2021

Messi y el PSG: ¿El club más rico del mundo?

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¿Quién es el DUEÑO del PSG y porqué dicen que es el CLUB de fútbol MÁS RICO del MUNDO?

El empresario qatarí está al frente del club galo desde 2011. Fue tenista profesional y construyó su poder bajo el ala de la familia real de su país.

De adolescente, Nasser bin Ghanim Al-Khelaïfi era simplemente el hijo de un pescador de perlas de Doha que intentaba, sin demasiado éxito, hacerse un nombre dentro del mundo del tenis. 

En aquel entonces, ni siquiera podría haberse imaginado que hoy, a los 46 años, sería uno de los hombres más ricos del mundo y estaría al frente de uno de los clubes más adinerados del fútbol internacional e intentando conseguir su primera Champions League.

A diferencia de otras historias en las que es difícil encontrar el momento exacto en que se torció el rumbo, en el caso del qatarí el punto de quiebre es fácilmente localizable: fue alrededor de 1988, cuando Al-Khelaïfi tenía 14 años y se preparaba para llegar al mundo del tenis profesional. 

Durante sus entrenamientos, el joven solía practicar con un niño seis años menor que él: Tamim bin Hamad Al-Thani, el cuarto hijo del emir Hamad bin Jalifa Al-Thani y, por entonces, heredero al trono.

Con los años, Nasser y Tamim cultivaron una gran amistad, que terminaría siendo muy lucrativa para Al-Khelaïfi. 

Tras una carrera tenística que duró algo más de una década, en la que llegó a ocupar el lugar 995 del ránking como mejor ubicación y apenas ganó dos games en los únicos dos partidos en torneos de nivel ATP que disputó, en 2005, y gracias a su relación con el príncipe, Al-Khelaïfi ingresaría a la flamante Qatar Investment Authority (QIA), la empresa fundada por la familia real para diversificar sus inversiones por fuera del mundo del petróleo y el gas.

Desde entonces, su ascenso fue meteórico. En 2008 fue nombrado presidente de la Federación Qatarí de Tenis y luego, vicepresidente de la Federación Asiática, dos cargos que todavía ocupa. 

Tres años después, en junio de 2011, su amigo Al-Thani lo pondría al frente de Qatar Sports Investments (QSI), la subsidiaria de QIA focalizada únicamente en negocios dentro del mundo del deporte. 

Su misión: convertir al recientemente adquirido Paris Saint-Germain, un club con apenas 41 años de historia y sólo un título de Ligue 1, en uno de los mejores equipos del planeta.

Nasser Al-Khelaïfi asumió como presidente y CEO de PSG el 7 de octubre de 2011. En los casi diez años de su mandato, el club invirtió más de 1300 millones de dólares para contratar a figuras de la talla de David Beckham, Zlatan Ibrahimovic, Kylian Mbappé o Ángel Di María, entre muchos otros, y rompió el orden del fútbol mundial en 2017 cuando pagó 222 millones para sacarle a Neymar a Barcelona y lo convirtió en el futbolista más caro de la historia por más del doble de diferencia con el antecesor. Desde su llegada, el conjunto parisino ganó siete Ligue 1, seis Copas de Francia, seis Copas de La Liga y ocho Supercopas de Francia y consiguió cuatro Tripletes nacionales.

Entre denuncias de sobornos y sospechas de múltiples violaciones a las reglas del Fair Play financiero, por las que nunca terminó condenado, el empresario fue ganando poder dentro del mundo del fútbol y de los negocios. Tras su llegada al trono parisino fue puesto al frente de beIN Sports (el multimedio deportivo de la cadena Al-Jazeera, controlada por la familia real qatarí) y de la cinematográfica Miramax y fue nombrado miembro del comité organizador del Mundial 2022. En noviembre de 2013, luego de que Hamad Al-Thani abdicara en favor suyo, Tamim Al-Thani nombró a su amigo Nasser como "Ministro sin cartera".

Tanto creció la influencia del presidente del PSG que en 2016, France Football lo designó "el hombre más poderoso del fútbol francés". Una designación que hoy parece quedar corta: en 2019 fue electo miembro del Comité Ejecutivo de la UEFA y se convirtió en el primer no europeo en ocupar un cargo dirigencial en la Federación.

A pesar de todos los negocios que encabezó en la última década, Al-Khelaifi no figura en la lista de Forbes de los hombres más ricos del planeta: los 16 mil millones de dólares en que algunos estiman su fortuna no son tenidos en cuenta por la revista, que asocia sus ingresos a la familia real. Una cosa es el dinero y otra muy diferente, el poder. Hombre recatado y de perfil bajo, existen muchos rumores acerca de supuestas propiedades que posee a lo largo y ancho del planeta, pero ninguno ha sido verificado.

Más allá de todo el dinero y las inversiones, hay algo que Al-Khelaïfi todavía no pudo comprar: una Champions League. 

Cada temporada, la historia parece estar más cerca de cambiar, y mucho más si cierra el fichaje de Lionel Messi.

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La historia de Messi

¿Cómo fue la infancia de Lionel Messi?

Criado en el seno de una familia humilde, es hijo de Jorge Horacio Messi, trabajador de una fábrica, y de Celia María Cuccittini, una limpiadora a media jornada. Tiene dos hermanos y una hermana. De niño jugó fútbol callejero con sus hermanos, Matías y Rodrigo, y también con su primo Tomi.

Lionel Messi


(Lionel Andrés Messi; Rosario, Santa Fe, 1987) Futbolista argentino. Poseedor de una habilidad técnica excepcional, una endiablada velocidad y una inventiva inagotable, desde que llegó de la mano de sus padres al F.C. Barcelona, con 13 años de edad, realizó una carrera vertiginosa por las diferentes categorías hasta el primer equipo, en el que debutó con apenas 16 años en un partido amistoso ante el Oporto. 

En 2004, con 17 años, Leo Messi jugó su primer encuentro oficial de la Liga española. Con 18 años le llegó su consagración internacional: formó parte de la selección argentina, campeona en el Mundial Juvenil Sub-20 de Holanda, disputado en 2005.

Leo Messi

Pero su verdadera eclosión se produjo con la llegada de Pep Guardiola al banquillo azulgrana: durante las cuatro temporadas en que el técnico dirigió el equipo (2008-2012), sus estadísticas goleadoras alcanzaron niveles estratosféricos, contribuyendo de forma decisiva a que el Barça viviese la mejor etapa de su historia al hacerse con 14 títulos de los 18 posibles. Considerado unánimemente el mejor futbolista del momento, su talento individual se ha visto reconocido en cinco ocasiones con el Balón de Oro (2009, 2010, 2011, 2012 y 2015).

Biografía

Conocido como Leo o Pulga, su inmensa calidad ya apuntaba cuando tenía cinco años y jugaba en el club de barrio de su ciudad natal dirigido por su padre, un empleado de la industria metalúrgica, y se reafirmó cuando, a partir de sus siete años, comenzó a jugar en las divisiones inferiores del Newell's Old Boys de Rosario.

A los 10 años, a punto de dar el salto al club River Plate de Buenos Aires, se le detectó un retraso en el desarrollo óseo causado por un bajo nivel de hormonas del crecimiento; el tratamiento médico era muy costoso, los clubes no quisieron afrontarlo y su padre, que no disponía de los recursos económicos necesarios, decidió entonces emigrar a Barcelona con su familia, donde se le había presentado una posibilidad laboral. 

En septiembre de 2000, Leo Messi realizaba una prueba en el F.C. Barcelona; el técnico Carles Rexach quedó maravillado con su talento futbolístico y, firmando en efecto un contrato en una servilleta de papel, como cuenta la anécdota, lo incorporó al club, que se hizo cargo del tratamiento del chico. Messi tenía entonces trece años y medía 1,40.

A partir de ese momento Messi se formaría en la Masia, centro de entrenamiento de la cantera azulgrana, donde pasó por las diferentes categorías (Infantil A, Cadete B, Cadete A, Juvenil A, Barça C y Barça B) antes de llegar al primer equipo, ya en la era del presidente Joan Laporta. Aunque participó en el amistoso que enfrentó al FC Barcelona con el FC Porto en el partido de inauguración del Estadio do Dragáo (16 de noviembre de 2003), su debut oficial en primera división con la camiseta azulgrana se produjo el 16 de octubre de 2004 en Montjuic, en el clásico derby con el Español de Barcelona.

Lo demás es historia reciente. A sus 17 años la Pulga marcaba su primer gol como profesional en el Barça en un partido contra el Albacete, y se convertía en el jugador más joven del equipo azulgrana en lograr un tanto en la Liga española. Durante esa temporada 2004-2005, las lesiones que arrastraban algunas figuras del primer equipo y su brillante trayectoria en el filial hicieron que fuese un habitual en las convocatorias y que contribuyera a la consecución del título de Liga, el primero de su palmarés.

Pero la progresión del ariete no había hecho más que empezar. La temporada 2005-2006, después de un gran debut en el trofeo Joan Gamper contra la Juventus de Turín, fue ya sin duda una buena campaña, aunque una lesión muscular lo apartó de los terrenos de juego en el tramo final de la competición. 

Se exhibió en el Santiago Bernabéu, en un memorable partido en el que los azulgranas vencieron al Real Madrid por 0-3, y en Stamford Bridge, en los octavos de final de la Liga de Campeones contra el Chelsea. El resultado de la temporada para el equipo de Frank Rijkaard no pudo ser mejor: ganó la Supercopa de España, la Liga y la Liga de Campeones, la segunda de su historia.

En 2006-2007 las cosas no fueron tan bien para el Barça, que no ganó ningún título importante, pero Messi deleitó a los aficionados con jugadas espectaculares que ya lo postularon entre los mejores jugadores del mundo. Entre sus momentos de gloria se cuenta el haber logrado los tres goles del Barcelona que le valieron el empate frente al Real Madrid, en el partido disputado en el Camp Nou el 10 de marzo de 2007.

Otro momento estelar en la biografía de Leo Messi fue su hazaña del 18 de abril de ese mismo año, en las semifinales de la Copa del Rey contra el Getafe, cuando eludió a cinco jugadores, portero incluido, e hizo el segundo gol de su equipo. 

Esta genialidad dio la vuelta al mundo y todos lo compararon con el Maradona que coronó el célebre "Gol del siglo" ante Inglaterra, en el Mundial de México de 1986. La progresión del jugador continuó en 2007-2008, una temporada difícil para el equipo, que vio cómo se agotaba el proyecto liderado por Ronaldinho y acababa la era de Frank Rijkaard en el banquillo. 

La era Guardiola

El FC Barcelona inició la temporada 2008-2009 con un nuevo proyecto que generó un cierto escepticismo entre los culés. El presidente Laporta había confiado el banquillo a un hombre de la casa, Josep Guardiola, con buenos resultados en el filial pero sin experiencia en primera. Los más optimistas auguraban buenos resultados a largo plazo. 

Pero la historia fue otra. Los chicos de Guardiola, con Messi convertido en crack indiscutible, pergeñaron la campaña futbolística más apasionante en décadas. Con un fútbol de libro, alabado en Europa y en el mundo, encadenaron victorias y resultados que pulverizaron todos los récords y consiguieron lo que parecía imposible: ganar en una misma temporada la Copa del Rey, la Liga y la Liga de Campeones, un triplete histórico que nunca antes había logrado ningún equipo español.

En esta campaña, Messi completó su primera temporada sin lesiones y superó su récord de partidos jugados (51) y goles (38). El argentino fue decisivo en las finales de Copa y Champions -marcó el segundo gol del Barça en cada una de ellas-, y, entre goles antológicos, fue el artífice de dos de los seis tantos que encajó el Real Madrid en el Santiago Bernabéu.

Los tres títulos obtenidos en la temporada 2008-2009 daban acceso al club a disputar otros tantos torneos a principios de la siguiente, antes de terminar el año: la Supercopa de España, la Supercopa de Europa y el Mundial de Clubs. En todos ellos resultó vencedor el Barça, marcando un récord histórico: levantar en un solo año los seis trofeos de las seis competiciones en que participaba. No hay duda de que, junto al entrenador, la explosión de Leo Messi fue una de las claves de que la era Guardiola (2008-2012) haya pasado a la historia como la mejor del club. 

El equipo conquistó durante ese cuatrienio 14 títulos de 18 posibles: a los seis citados, hay que sumar otras dos Liga españolas (2009-2010 y 2010-2011), otra Liga de Campeones en 2010-2011 (la tercera de Messi y la cuarta de la historia del club), la Copa del Rey (2011-2012), la Supercopa de Europa (2011), dos Supercopas de España (2010 y 2011) y el Mundial de Clubs de 2011.

De hasta qué punto el papel de Leo Messi en tales triunfos fue determinante pueden dar una idea las estadísticas. De los 16 goles marcados por Messi en la temporada 2007-2008, pasó a anotar 38, 47, 53 y 73 tantos en los cuatro años de la era Guardiola, cifras de por sí estratosféricas que pueden indicar además, en su progresión, que aún no ha tocado techo, como lo ilustran otros aspectos en que sus números mejoran cada año. 

Ya no sólo hay que valorar su virtuosismo en el regate (sus cambios de ritmo rompen a los rivales hasta el punto de que el técnico del Arsenal, Arsène Wenger, lo llamó "jugador de PlayStation") y su extraordinaria precisión en los disparos y remates, sino también una visión del juego que ha hecho de él un excelente pasador: de apenas tres o cuatro asistencias de gol en sus primeras temporadas, pasó a 29 en la temporada 2011-2012.

A estas alturas ya eran muy pocos los expertos, entrenadores y colegas que no lo consideraban el mejor jugador del mundo. La prensa deportiva y las federaciones internacionales lo reconocían como tal, y además de los incontables títulos de su palmarés deportivo, el jugador acaparaba reconocimientos individuales. Ya en 2009 la revista France Football le concedió el Balón de Oro y la FIFA lo designó Mejor Jugador del Mundo. Ambos premios se unificaron un año después en el FIFA Balón de Oro, que recayó sobre el argentino en sus tres primeras ediciones (2010, 2011 y 2012) y de nuevo en 2015.

El sueño del Mundial

Con la victoria de España en el Mundial de 2010, algunos de los compañeros de Messi en el F.C. Barcelona habían logrado incluir en sus vitrinas todos los trofeos posibles; para el argentino, ésta seguía siendo una asignatura pendiente. 

A pesar de su contribución, y excluyendo la medalla de oro en los Juegos Olímpicos de Pekín de 2008, los resultados con la selección argentina fueron mediocres. En el Mundial de Alemania (2006) no pasó de los cuartos del final.

Con la selección argentina

Mayores expectativas despertó la participación en el Mundial de Sudáfrica (2010), con el astro argentino en un momento pletórico de forma; pero el combinado albiceleste, bajo la controvertida dirección del legendario Maradona como técnico, cayó estrepitosamente frente a Alemania, de nuevo en los cuartos de final. El distinto rendimiento de Leo Messi con la selección y con el F. C. Barcelona hizo correr ríos de tinta; al final, el fútbol es un juego de equipo en el que cualquier análisis debe tomar en consideración muchos factores.

Los argentinos depositaron sus esperanzas en el Mundial de Brasil de 2014, pero hay que decir que Messi no llegaba a la cita mundialista en su mejor versión. Finalizada la era Guardiola, demostró seguir siendo el de siempre en la temporada 2012-2013 con Tito Vilanova (el segundo de Guardiola) en el banquillo, y el club se llevó la liga con récord de puntos; una lesión del crack argentino en el tramo decisivo de la temporada impidió triunfos mayores. 

Pero a principios de la temporada siguiente, con su compatriota Tata Martino como entrenador, una recaída en la lesión lo apartó dos meses de los terrenos de juego, y aunque el Barça tuvo opciones hasta el final, la temporada 2013-2014 se cerró sin ningún título y con un Messi menos inspirado que en las campañas precedentes.

Ciertamente, ni la selección argentina ni Leo Messi brillaron especialmente en el Mundial de Brasil de 2014. Si bien los albicelestes empezaron ganando todos los partidos, lo hicieron siempre por la mínima, y fue necesario acudir a las tandas de penaltis para superar las semifinales. 

En la final contra Alemania, que venía de humillar a los anfitriones por un inaudito 7 a 1, los argentinos supieron frenar el embate germánico y dispusieron de oportunidades, pero acabaron perdiendo en la prórroga. Considerando el juego exhibido, el subcampeonato fue un buen resultado; los argentinos no lo habían logrado desde los tiempos de Maradona. Messi fue además distinguido con el Balón de Oro del Mundial, pero el sueño de conquistar el preciado título quedó otra vez pospuesto.

La era Luis Enrique

A estos relativos fracasos con la selección argentina debe contraponerse, después de dos temporadas difíciles, un nuevo resurgimiento del esplendor del Barça con el desembarco como técnico de Luis Enrique, antiguo jugador azulgrana que, tras su incorporación a principios de la temporada 2014-2015, justo a la finalización del Mundial, ha sabido dotar al equipo de nuevos registros más allá del fútbol «al primer toque» de Guardiola, reforzando su verticalidad (con precisos pases largos que sorprenden y superan las líneas rivales) y la potencia del contraataque.

Sumando a ello la plena recuperación de Leo Messi y su perfecto entendimiento con las nuevas incorporaciones en la delantera (el extremo brasileño Neymar, joven promesa y probable sucesor de Messi, y el uruguayo Luis Suárez como killer o rematador), el Barcelona reeditó en la temporada 2014-2015 los éxitos de 2009 adjudicándose por segunda el vez el triplete (la Liga española, la Copa del Rey y la Liga de Campeones), y a punto estuvo de igualar los seis títulos en año natural al proclamarse campeón de la Supercopa de Europa y del Mundial de Clubes al inicio de la temporada 2015-2016. 

Lionel Messi y su historia con el FC Barcelona

Luego de dos décadas de estar vinculado con el club, el FC Barcelona hizo oficial este jueves la salida Lionel Messi: el mejor jugador de su historia. 

El FC Barcelona anunció este jueves 5 de agosto que Lionel Messi no continuará en la entidad azulgrana, debido “a los obstáculos económicos y estructurales” de la LaLiga Española, siendo este el principal motivo de la no continuidad del argentino.

“Ante esta situación, Lionel Messi no continuará ligado al FC Barcelona. Las dos partes lamentan profundamente que finalmente no se puedan cumplir los deseos tanto del jugador como del Club”, señaló el club en un comunicado.

Así, finaliza un relación de más de 20 años, que comenzó con la firma de Messi en una servilleta, luego de que el Directo Deportivo de ese entonces del Barcelona, Carles Rexach, lo llamará para una prueba de 15 días, de los cuales sobraron 14 ante las condiciones del argentino.

Llegada a Barcelona

Fue en el año 2000, con la edad de 13 años, cuando Lionel Messi decidió dejar su vida en Rosario, para viajar a Barcelona en busca de triunfar en el fútbol.

Unos años antes, al argentino se le había detectado una deficiencia en la hormona del crecimiento y el club donde militaba, el Newell’s Old Boys, no se podía hacer cargo del tratamiento, que costaba cerca de 900 dólares mensuales.

Ante esa dificultad, su padre, Jorge Messi, decidió buscar alternativas en otro clubes, siendo España, y especialmente el Barcelona, el lugar que le abriría las puertas a su hijo para que creciera tanto físicamente, como profesionalmente.

El director deportivo de ese entonces del Barcelona, Carles Rexach, había citado a Jorge y Lionel a una prueba que duraría 15 días, donde Messi debía de mostrar sus habilidades con el balón.

Al observar la facilidad con la que Messi superaba a sus rivales, decidió darle la oportunidad en el equipo azulgrana y lo hizo firmar su primer contrato en una servilleta, para asegurarse a la nueva perla argentina.

Desde entonces, el Barcelona se hizo cargo de los tratamiento de Lionel, que en ese entonces solo media 1,40 metros.

Paso por la Masia y debut con el primer equipo

Su paso por las diferentes categorías del Barcelona fue tan fugaz como espectacular: jugó en Infantil A, Cadete B, Cadete A, Juvenil A, Barca C y Barca B siendo uno de los mejores jugadores en cada categoría y dejando registros espectaculares.

Tan solo tres años después de su llegada a Barcelona, Messi debutaba en el primer equipo del club, en el partido amisto contra el Porto, bajo la tutela del técnico holandés, y ex figura del Barcelona, Frank Rijkaard. Messi se convertía así en el jugador más joven del cuadro catalán en debutar, con tan solo 16 años y cinco meses.

Sin embargo, La Pulga tenia que esperar poco más de diez meses para hacer su debut en un partido oficial, el cual llegó el 16 de octubre del 2004 en el derby contra el Español. Sus constantes lesiones marcaron su irregularidad en esa temporada, pero pudo aparecer en los meses finales para marcar su primer gol.

El primer tanto del argentino con Barcelona llego en mayo de 2005, cuando con asistencia de Ronaldinho marcó frente al Albacete, para convertirse en el jugador mas joven del club en anotar en Liga con 17 años, 10 meses y 7 días.

Su capacidades le fueron dando espacio en el primer equipo, pero el mal juego mostrado por la plantilla bajo el mando de Frank Rijkaard después de salir campeones de la Champions, hizo que su juego no deslumbrara en toda su capacidad, hasta la llegada de Guardiola.
Era Guardiola y sus cuatro balones de oro

Ante la salida del holandés Rijkaard, el FC Barcelona hacia oficial a Pep Guardiola como el nuevo técnico del club, el cual llevo a lo más alto a la entidad, siendo Messi la estrella y pieza fundamental de ese equipo.

En su primera temporada en el banquillo, el cuadro catalán gano todos los títulos disputados durante la temporada, consiguiendo el ‘triplete’ y posteriormente el ‘sextete’, convirtiéndose en el primer club de la historia en conseguirlo.

Tras la espléndida temporada, Lionel Messi era elegido por la revista France Football como el mejor jugador de la temporada 2009 y le otorgaba su primer balón de oro con 22 años, siendo el segundo jugador más joven en conseguirlo, por de tras de Ronaldo Luis Nazario.

De la mano de Guardiola, Messi no bajaba su rendimiento y cosecho el trofeo en tres ocasiones más, siendo el primer jugador en el historia en conseguir cuatro balones de oro y de manera consecutiva, tras los conseguidos en 2010, 2011 y 2012.

Años de contraste y vuelta a la gloria

Luego de cuatro años de dirigir al FC Barcelona, Pep Guardiola dejaba el banquillo y proponía a Tito Vilanova como su sucesor.

Durante esa transición, Lionel Messi conseguía imponer la marca de 91 goles en el año 2012, siendo su ultimo gran año antes de su pequeño declive.

En las dos temporada post Guardiola, el Barcelona solo pudo lograr la liga de la temporada 2012-2013 y la Supercopa de España de 2013, con poca incidencia de Messi, que veía cómo despegaba Cristiano Ronaldo en el Real Madrid.

Las buenas temporada de Ronaldo lo acreditaron como el ganador del Balón de Oro en la dos temporadas siguientes a la última conseguida por Messi: la de 2013 y 2014.

La llegada de Luis Enrique en el 2015 cambió la actitud de la plantilla y con la adquisición de Luis Suarez, el Barcelona armaba el tridente de la MSN, junto a Neymar y Messi, siendo el jugador argentino el que encabezaba los mejores registros.

De la mano de Luis Enrique, Messi volvía a sacar su mejor versión y el Barcelona conseguía su segundo ‘triplete’ en la historia y su cuarta Champions League a nivel institucional.

La buena temporada de La Pulga, lo acreditaban como ganador, nuevamente, del Balón de Oro en 2015 y conseguía así su quinto trofeo individual.

Última renovación de Messi

Con la llegada de la nueva directiva, encabeza por Jose María Bartomeu, Messi firmaba con 30 años su último contrato como profesional del FC Barcelona, siendo la octava mejora salaria en la entidad desde que fue futbolista del primer plantel.

En 2017, el argentino se vinculaba con el FC Barcelona hasta la temporada 2020-2021, siendo el mejor contrato en la historia del fútbol, que posteriormente sería revelado por el Diario El Mundo.

El Barcelona se comprometía a pagar a Messi 555.237.619 millones de euros por su servicios, para los próximo cuatro años. 

El argentino ingresaba por temporada 138 millones de euros entre fijos y variables, las cuales, junto con la mala administración de la directiva, fueron comprometiendo económicamente al Barcelona.

Con el gasto millonario por jugadores y las afectaciones de la pandemia, hicieron que la entidad catalana no pueda renovar por novena ocasión a su mejor jugador en la historia del club, por lo que este jueves 5 de agosto hizo oficial su salida.

Por lo que Messi se despide del FC Barcelona luego de dos décadas y dejando 35 títulos en el club: 10 títulos de Liga, 4 de Liga de Campeones, 7 de Copa del Rey, 8 de Supercopa de España, 3 del Mundial de Clubes y 3 de Supercopa de Europa.

Ademas, se despide con cifras récord e históricas de la entidad, siendo el jugador que más veces vistió su camiseta (778), el máximo goleador de la historia de la institución (672) y jugador que más balones de oro ganó y botas de oro consiguió (seis en las dos ocasiones).

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